Powered By Blogger

sábado, 17 de abril de 2010

Canción I

Cuando se acaba el baile
a dónde van las mariposas muertas?
dónde se instala el hambre?
qué misterio sucede en la cuneta
de un corazón inane?

Cuando termina el juego
quién reparte las culpas inherentes
a su fracción de tiempo?
por qué te das la vuelta indiferente
y huyes en silencio?

Preguntas sin respuesta
quién recoge el cadáver del amor
y a dónde se lo lleva?
por qué resuena el eco de tu voz
aún en mi cabeza?

miércoles, 14 de abril de 2010

El ciclo de Anadía

I - Big Bang

Corazón desnutrido
la silueta del terco funcionario amador
regurgitará un día
floreciente carroña
del sobaco de dios

en el zaguán soleado del día de mañana
brotará sin remedio
sin esperanzadora fe de peluquería
esa vana ilusión que me obliga a temblar
en el zaguán soleado del día de mañana

toda filosofía
se caerá por su peso cual manzana podrida
con toda gravedad
y la legión infame
devorará a sus vástagos

mientras los enculados por los amaneceres
esos analfabetos
de las dicotomías ebrios de sus quehaceres
producirán sus mierdas en proporciones bíblicas
consumidos por su ego y vencidos por su ira

entre el todo y la nada
el gran ojete núbil que algunos llaman orbe
se morirá de envidia
mirándote a los ojos
y sabiéndote mía

porque cuando reviente esta puta mentira
tú estarás para verlo
sentada en un sillón en la primera fila
con las piernas cruzadas y con las mariposas
revoloteando ecuánimes dentro de tu cintura

hasta que llegue yo
corazón desnutrido desnudo devaluado
metódico asesino
de momentos pasados
a la sombra del tiempo

y tú bajo mi abrazo de matador de osos
entre el polvo infinito
corregirás la mueca de tus hambrientos labios
iluminando el mundo con tu feroz sonrisa
y ese será el principio del resto de tu vida 


II - Te Imagino Así

Imagino tu vientre torturado por las mariposas ciegas que torturan mi vientre y tu estómago destrozado por una duda feroz que lleva mi nombre escrito en un costado.

Imagino tus pechos desbordados de besos aún no dados, de caricias suaves que las yemas de mis dedos te darán sólo si quieres sentir tus pezones erizados por un deseo en flor.

Te imagino así...

Imagino tus manos renunciando a la nada; tus dedos afilados acuchillando fieramente mi espalda mientras te ríes del mundo con tu sonrisa amable.

Imagino tu boca sentenciando mi vida entera entre tus labios perfumados de sexo; la humedad profunda de esas alas sangrantes desvistiendo mi alma airadamente, con la certeza de las balas.

Te imagino así...

Imagino tu desnudez interrogante destrozando mi mirada, despojándome de mí mismo con la misma sencillez con que te quitas las bragas.

Imagino tus ojos descarados encontrando la respuesta que ya conoces en mis pupilas: Mi desnudez colgando de tus pestañas.

Te imagino así...

Imagino tus dientes dándose la bienvenida al festín de la piel, devorando mi carne con el ansia violenta de la necesidad y la fiebre impúdica de la pulsión sexual.

Imagino tus muslos incitándome al baile de sombras entre sábanas, atrayendo mis caderas a tu infierno apenas entreabierto. Y yo hundido entre tus llamas.

Te imagino así...

Imagino tu voz a viva voz cambiando mi mundo desde tu garganta; el eco sonoro de tus palabras acariciando mis tímpanos como cantos de sirena.

Imagino cómo sería perderse en ti y no encontrar jamás el camino de vuelta. Vivir perdido entre tus brazos y no salir jamás al mundo... Puede que eso fuera la felicidad total.




III - Apología de tus muslos

Tus muslos son laderas encumbradas
en las que quisiera trasnochar siempre
y ser un caminante entre las brasas
camino de tu sexo y de tu vientre

Tus muslos son la patria que deseo
la tierra que horadar con la mirada
la puerta que me abres en silencio
el surco de mi vida en tus entrañas

Tus muslos son el muro que separa
mi mundo de tu mundo y de ese mundo
del futuro feroz que nos depara
esta ansia insufrible de estar juntos

Tus muslos servirán como alimento
como fruta prohibida que repara
a esta alma sólo cuerpo que poseo
el día que nos veamos cara a cara

Tus muslos me envenenan Anadía
en las noches de sueños enredados
morir entre tus muslos no sería
menos dulce que hacerlo entre tus labios



IV - Tus Ojos

I

Las estrellas del cielo se han podrido de envidia
de tus brillantes ojos
y yo busco la luz que ilumine mi vida
en tus brillantes ojos

y camino sin prisa buscando entre las sombras
la luz de tu mirada
y tú te abres de ojos mostrándome entre bromas
la luz en tu mirada


II

Tu mirada exquisita en tus ojos castaños
limpios claros profundos como el agua de un río
yo me baño en tus ojos con mis ojos cansados
cansados de haber visto lo terrible y lo críptico

Tu pupila redonda libertina y perfecta
es reflejo seguro de tu esencia más íntima
y tus párpados finos guardan una secreta
comunión con las aves y las rutas marítimas

Tus pestañas danzantes aletean con gracia
dando al viento el poder de esparcir la semilla
de un amor decidido que se mira a la cara
y se enfrenta en voz alta a la melancolía




V - Tus Manos

El ansia de sentir el roce de tu mano
tu mano voladora fina y suave
contra una mano mía
diosa que me estremece
y me devuelve terca el mismo sueño
El ansia de sentir el roce de tu mano

Quiero cantar sin voz a tus manos desnudas
hacer la apología de tus dedos
de tus dedos pequeños
tus dedos como imanes
quiero decirte que amo esas dos manos
como se ama a un amor largo tiempo añorado

Sólo aspiro a morir bajo tu mano amable
en una noche azul como las flores
que crecen en mi pecho
y de mi pecho salen
camino de tus uñas como dagas
para morir al fin al término del viaje

Y renacer recreado por tus dedos expertos
mi silueta febril perfeccionada
por la memoria táctil
de tus dígitos sabios
pariéndome de nuevo cada tarde
dibujado en el aire con un gesto elegante

Quiero que me recorra el eco de tus manos
quiero sentir tus huellas dactilares
emborronar mi piel
sedienta de ese instante
y besarte las manos en silencio
para darte Anadía las gracias por tocarme




VI - Tu Nombre

I

( Prefacio)


Yo pronuncio tu nombre lentamente,
lo susurro en mis sueños noche y día,
me asalta a cualquier hora de repente,
se escapa de mis labios: ¡Anadía!

Me ocurre estando solo o entre la gente,
sin freno, sin control o alevosía,
y aunque quiera apartarlo de mi mente,
mi mente escupe terca: ¡Anadía!

...


II

Tu nombre no es de flor pero parece
azul como la flor
que nunca se marchita
y se mantiene intacta mientras todo revienta

Tu nombre sabe a cielo y sabe a infierno
el cielo de tu boca
el infierno de un beso
y tus dientes perlados mi propio purgatorio

Tu nombre se parece al amor que te tengo
en que ambos son regiones
del ignoto universo
inabarcables e imperecederas

Tu nombre es el lamento de un poeta
en sus primeros versos
tus ojos y tu boca son la estrofa
y tu cuerpo encendido es el poema


III

(Epílogo)

Anadía lo escrito
escrito queda negro sobre blanco
ni el viento más feroz
ni el tiempo en su vertiente de letal asesino
podrán borrar jamás
las palabras que he escrito y que te nombran
palabras que acaricio
para tenerte cerca
para evitar el hastío del abrazo imposible
para ganarle la guerra a la tibia
espera que me mata
parsimoniosamente
por eso nunca dejo de pronunciar tu nombre




VII - Duermevela

Acostumbro a dormir donde el sueño me atrape
bajo un puente romano
vencido por los siglos
quizás entre la hierba o la ceniza
bajo un árbol tal vez con su coro de pájaros

y sueño con la vida y nada temo
del unicornio negro
del orco maloliente
ni de la ira terrible de un dios absolutista
que clama venganza contra el descreído

quiero decir que duermo tranquilo e impasible
sin esperar siquiera
que vengan a buscarme
fantasmas del pasado armados de silencio
o demacrados zombies con sotana


Pero hoy


me retuerzo intranquilo entre las sábanas
y no puedo dormir
me asalta tu recuerdo
las horas impagables de charlas y de risas
la imposiblidad de darte un beso

un delirio febril me atenaza por dentro
congelando mis órganos
con su temida nieve
pátina de terror y de desasosiego
paralizante blancura encrespada

y maldigo mil veces tu inevitable ausencia
y detesto la vida
y la muerte y la espera
la horrible sensación de ser menos que nada
ese miedo mortal de no tenerte

porque quiero poder mirarnos frente a frente
dormir entre tus piernas
el sueño de los justos
buscando en tu cintura el calor de tu boca
y sólo despertar cuando tú me despiertes


VIII - Las Horas

Horas apoltronadas
bajo un sol de justicia
en la vereda azul de tu sonrisa
si no en la negritud de tu mirada

Y el deseo de ser lágrima viva
descendiendo despacio por tu espalda
y esta sed de beber que es infinita
de esos labios de carne desbordada

Horas inmateriales
bajo una luna austera
por el sendero triste de tu ausencia
ese camino gris pesado y grave

Y esta ansiedad de alzar al fin las velas
sin trazar ruta alguna en este viaje
y que el vaivén salvaje de tus piernas
no me impida lanzarme al abordaje

Horas desagradables
bajo una nube etérea
en el rellano añil de tu conciencia
exhalando suspiros irritantes

Y estas ganas de asir tu cabellera
reconocer tu pulpa ingobernable
la impúdica raíz de tu corteza
la suavidad serena de tus carnes

Ya no te busco

Ya no te busco con incertidumbre
en la espesura de este bosque humano
ya no es mi voluntad ir a buscarte
siguiendo el eco de mis propios pasos

Sí te busqué con rabia en el pasado
escudriñando ansioso entre el follaje
con la tonta esperanza adolescente
de dejarme la vida en encontrarte

Quizás te tuve entre mis torpes manos
en alguna ocasión afortunada
y te dejé marchar sin darme cuenta
de que se iban contigo mis entrañas

Pero a día de hoy pienso y declaro
cansado de este esfuerzo improductivo
que es inútil buscar lo que no existe
aunque el corazón diga lo contrario

Ya no te busco y me parece triste
que tu luz no ilumine mi camino
aunque también es cierto que no abjuro
de haber perdido tanto tiempo en vano

Proto-agonista

   No el olor de la tierra mojada, sino el olor propio de una noche de sábado bañada por la amargura del vodka; o el vodka bañado por la amargura propia de una noche de sábado y aderezado por el olor intenso de la tierra húmeda; o, lo peor de todo, ninguno de estos olores. Ningún olor. Quizás el perfume dulzón de la madrugada, con el cual te vas a la cama, con sus sábanas húmedas, amargadas, propias de una noche de sábado, e intentas dormir en vano, barruntando si tal vez, a lo mejor, el próximo sábado conseguirás que el domingo amanezca con el dulce sabor amargo de una entrepierna húmeda susurrándote a los labios que las noches de sábado ya no son para ti, machote... que estás acabado.

Son sin sentido

“Nada es verdad, todo está permitido”

(El Viejo de la Montaña)



Cuando descubres que nada es verdad
que nada
              nada
                      nada
resulta invïolable
aciertas a entender
el orden invariable de las cosas
ese Totum total totalitario
que cerca al individuo
reduciéndolo a lo ínfimo

...Son sin sentido

Consideraciones

Contemplo hoy el mundo donde vivo, contemplo
murallas erigidas sobre la Libertad
como piélagos crípticos.
Y el hombre sumergido bajo su propio odio.
Y el miedo como medio...

Sin embargo qué fácil, qué sencillo sería,
atraer madrugadas
con un cielo imposible; repoblar las ideas
con astillas candentes;
o matar al tirano con un corte de manga...

Bastaría con uno,
o con dos o tres hombres,
que olvidasen el tedio de la vida inconsciente.
Bastaría un berrido que aturdiese a la muerte.
Bastaría el deseo...

Contemplo, en fin, el mundo
donde habito. Contemplo
la vida quieta; el tiempo como una foto fija.
Sin embargo qué bello, qué valioso sería,
dentro de lo probable, perseguir lo imposible.

Ditirambo

De la vendimia dios, Baco,
Aquí tienes un discípulo.
Entre en mí el licor a saco,
Salga al fin de este versículo.
Puesto que rima en testículo
Y mi gran picha está enhiesta:
¡Que dé comienzo la fiesta!

Dime amiga en dónde escondes
Esa agraciada botella;
Es de Albarei de los Condes,
Procura no hacerle mella.
Mi polla en tus labios sella
La eternidad del instante:
¡Dirás que no tengo aguante!

Sustituto de la sangre,
Vino viaja por mis venas;
Si dejas que lo derrame,
Aliviaré en ti mis penas.
Porque corta tus cadenas
Y deja suelta mi verga:
¡Que nunca a cabe la juerga!

Bebamos con vinolencia.
Que no halle copa vacía.
Es la madre de la ciencia
La culta dipsomanía.
En el fragor de la orgía,
Diplopía de alto grado:
¡Veo un doble beo alado!

¿Qué quereis viles gusanos?
¿Qué la vid que sed apaga
Cortemos con nuestras manos
Porque Europa es la que paga?
Mientras te quito la braga,
Grito rasgando mis ropas:
¡Que se jodan las europas!

El Martín Códax me inspira,
Me hace decir cosas tales,
Que Wojtyla ya conspira
“para curarme mis males”.
No estás, cura, en tus cabales:
¡Sería alegría extrema
Que dictases mi anatema!

De Dionisos en memoria
Compuse este panegírico.
Que se quede él con la gloria;
Quedes tú con un mal vírico.
A punto del coma etílico,
Que son horas bien comprendo
De poner fin a este engendro.

Prometeo

Sumido en los trasiegos de un ego irrenunciable
No habitado por nada ajeno a sus enjundias,
Discuto con mis huesos sobre el valor del aire
Y escupo un conjugado de sangre por sus grutas.

Escucho los latidos de un corazón amable
- apócrifo doctor ... pero perito en dudas-
Y saco todo en claro sobre lo inevitable
Y llego a conclusiones que arañan a la angustia.

Con la muerte disputo mis asuntos vitales
Ungido por amor anárquico a la turba,
Y desprecio a los cerdos que derraman la sangre
De algunos hombres buenos que aúllan a la luna.

Me divierte pensar que cuando acabe el baile
Y el compás de las horas se detenga en mi grupa,
Habré dado que hablar. Y las autoridades
Temerán que los niños imiten mi conducta.

Coitus Interruptus

Inscrito en mi memoria está tu nombre:
Nada lo borrará a pesar del tiempo...
...Que lo grabó un cincel enamorado,
que tú no comprendiste que el amor

se inspira con frecuencia en el deseo
y el destino de dos cuerpos que se aman
es fundirse y fundarse en otro nuevo,
exento de prejuicios, de pretextos...

Parábola del filántropo

Te ofrezco todo cuanto tengo:
                                              (todo
Y poco más que nada)
Un fragmento de vida no vivida,
Un reloj sin pila, una
                                 Almorrana,
un puñado de hojas malescritas
- y muy malintencionadas –
Y poco más que nada.

Y te concedo el fruto
De las testas que englobo en el escroto.

Fantasma sentimental

Sin embargo el espejo
devuelve una figura de obsidiana
y el puto tren fantasma
arriba a la estación de la inocencia

Y tú
de tan pura, tan etérea y tan soñada
me resucitas con un

B
E
S
O

DIE BLAUE BLUME

FLOR AZUL que vienes de la oscura
noche a desatar de nuevo mi alma
cada sábado. Eres pura imagen
viva de mi anhelo extremo. Vasta
inquietud, te busco en el silencio
críptico de esta tumba inhumana.
Sólo existes tú: la muchedumbre
no es sino el recuerdo de un fantasma.

FLOR AZUL, de tu cuerpo de ninfa
voluptuosa emana mi presencia
física de amante libertino.
Lírica, curva, carnal dehesa..
dehesa de esas de seda rosa
que en noches lunares se me enreda.
Fantasea... dime que de noche,
en tu cama impaciente, me esperas.

Curso de filosofía aplicada

(Demostración empírica)


Aléjame del mundo.
Llévame deprisa a la envolvente brasa
augusta, cegadora,
de la Nada.

No mires hacia atrás. No tengas esperanza:
que todo resulte cotidiano, sin alhajas,
sentimientos, ademanes, añagazas,
ni cánticos, ni vértigos, groseras
vocales alargadas
o arrebatos de muerte simulada.

Y sobre todo- y esto es un aviso-
no pronuncies la irremediable, estúpida
PALABRA...
Consulta con Lucrecio: de la Nada
no puede salir nada.

Cuerpo de espuma

En tu cuerpo desnudo he olvidado mis miedos,
infantiles horrores que en las noches sin luna
corrompían mis sueños con terribles argucias,
obligando a aquel niño, a aquel ángel sin vuelo,

a vivir temeroso, ojeroso, discreto.
Las pasiones humanas, las ardientes e impuras,
las guardaba aquí dentro en mi edad inmadura,
como dicen que oculta el avaro el dinero.

Crecí a golpes de vida, deshojando mis sesos,
modelando mi carne hasta hacerla armadura
con la cual yo pudiera, sin la mínima duda,
trastocar mi apariencia convirtiéndola en hielo.

Pero un tímido día (delicioso recuerdo),
caminando sin rumbo por una senda oscura,
una luz solitaria despertó la ternura
que hibernaba silente en mi gélido pecho.

Esa luz eras tú, provocando el deshielo
de mi vieja coraza, hasta entonces robusta.
Esa luz eras tú, derogando la injusta,
la tiránica ley, que me impuse hace tiempo.

En tu cuerpo desnudo he enterrado mi cuerpo.
¡Y he sentido mi piel tan pegada a la tuya,
que el temor de no ser una piedra futura,
arrumbada, indolora, se ha tornado en desprecio!

Y tu cuerpo ha venido a salvarme del tedio.
Y tu cuerpo desnudo: breve canto de espuma.

Breve tratado sobre el pudor y la candidez

Guardé mi dicha entre los
montes pelados de tu
pecho
Arrasé con mi fuego
tu campiña Arañé
con mis ojos tu sexo
Y para qué...

De un crepúsculo frío
de mármol pavoroso
- acaso no fue un sueño?-
descendió tu cadáver para darme un sermón
sobre
el precalentamiento
Y para qué...

Cuando el deseo atroz
me reconcome dentro
olvido los tratados de las buenas maneras
ignoro al corazón
- un órgano superfluo -
y lamo y acaricio, desgarro y muerdo
Y para qué...

No eleves preguntas
a las nubes Ellas te las devuelven
a las nubes núbiles
enseño tu bellísimo perfil ensangrentado
las tiño de escarlata
hoy eres mi instrumento
Y para qué...

Un amor homicida
de contorno caníbal
te ofrezco
Y en un copón bendito mi esperma bautismal
aún caliente y rico
también vitaminado
Y para qué...

Que si hay algo sublime en el amor
es el desprendimiento de rutina
así que no te esfuerces en ser lo que no eres
y goza de tu muerte
- de tu pequeña muerte -
empalada con rabia por mi amor insurgente
Y para qué...

Para que tu obstinada
gruta
de tan salada y húmeda
reviente en bocanadas de aire fresco
se esparza por senderos infrecuentes
Para oírte gemir sin ir más lejos
más lejos de tu vientre

Tal vez así comprendas
que esos ojos tan grandes y redondos
además de iluminar el suelo donde piso
también pueden matar
también pueden matar
también pueden matar

Jodienda y Fuga

Oh, el agón!
Dos cuerpos
se pelean.
¡La batalla!
Tus labios espadañas
Pezones
retráctiles
que arañan
Oh, Eros y Oh, Thanatos!

Pero antes de darme la patada
Comprueba que el deseo no respira
Y mira hacia el mañana
desnudo corazón.... arrepentida.

Last Stupid Standing

Si el amor no fuese una mentira
vana expresión de sentimientos vanos
quizás mi corazón tendría vida
vida que yo pondría entre tus manos

Si el amor no fuese una falacia
un no sé qué de tirios y troyanos
tal vez este rincón sería Arcadia
en lugar de un horrísono pantano

Si el amor no fuese un puro invento
un juego que jugaban los enanos
un vomitivo en flor, un triste cuento
que nos gusta contar a los humanos

-Y si fuese verdad, sencillamente?

Sencillamente yo, creyente ufano
prosternado en silencio ante tu vientre
volvería a vivir aquel verano.

Amor y Licantropía

( Habla el Lobo Feroz)

El amor?
              El
                   amor?

Olí las rosas de septiembre,
lo recuerdo. Pero era tarde,
tarde.
Y la luna no aulló
al lobo.
Saboreé el veneno astuto
de la incipiente e insidiosa
diosa.
Y la nada besó
al lobo.
Palpé, en la oscuridad nocturna,
la trampa que intuía vaga
mente.
Y la vida zahirió
al lobo.
Oí el cantar zumbón, grosero,
del pájaro profundo, del de
dentro.
Y el sonido aturdió
al lobo.
Miré a mi alrededor, exhausto,
medio loco y transido por el
ansia.
Y de poco sirvió
al lobo...

Maldigo los sentidos que forjaron
mi lamentable condición de amante.
Maldigo mi ebriedad superlativa,
maldigo a los demás
y me maldigo
por confundir la luna con un queso, por ser
un lobo solitario
entre una gran manada caníbal de corderos.

Amo tu cuerpo breve

Amo tu cuerpo breve
el símbolo perfecto de la belleza escueta
que derrama su luz
azul
incandescente
sobre este mundo gris con su fealdad de cera

Amo tu cabellera
que resbala silente por tu espalda desnuda
y besa tus caderas
y es igual que la hiedra
que atenaza mis manos con la flor de la duda

Amo tu boca tierna
tus dientes impecables definen la blancura
porque odio la caverna
porque temo al vacío glacial que me rodea
acércate y déjame sentir tu mordedura

Amo tu piel de seda
con esos promontorios iguales a las dunas
como la carretera
que va a Ningún Lugar común tras las estrellas
tu piel es peligrosa y está llena de curvas



Déjame que te diga amor en esta noche
que te quiero sin más
así como lo oyes
tumbados frente al mar
a la orilla del día que amenaza arribar


Y que el silencio borre la máscara del odio

Hastío más poderoso que el Amor

Piel de fuego, luz de abrigo solar,
hilera de farolas en mi pecho...
De tanta claridad
me has dejado ciego.

Tatúo tus contornos en mi mente
con la aguja morada del Deseo.

Pero tú

Cansada de jugar al mismo juego
te deslizas silente hacia la Aurora
y cruzas el Leteo
para olvidar la historia.